El granada femenino frena en seco y dice adiós a la champions | ideal

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Adiós a la Champions League. Nunca fue un deber para el Femenino, pero sí un sueño cada vez más alcanzable a lo largo de la ... segunda vuelta. La derrota ante un Real Madrid inmerso en la


pelea por el título de Liga F apeó a las rojiblancas de tal lucha, imposible ya por la matemática a falta de tan solo dos jornadas para el cierre. Los goles de Caroline Weir y Linda Caicedo


ajusticiaron al Granada, que creyó gracias al tanto de Edna Imade pero que tampoco pudoaprovechar la oportunidad de 'cazar' al Athletic con la Supercopa de España en juego. Granada


Sandra Estévez; Alba Pérez, Marta Carrasco (Isa Álvarez, m. 88), Cristina Postigo; Laura Pérez (Andrea Gómez, m. 79), Ari Mingueza, Leles Carrión (Miku, m. 88), Lauri, Alexia Fernández


(Lucía Ramos, m. 88); Ornella Vignola y Edna Imade. 1 - 2 Real Madrid Mylène Chavas; Sheila García (Gálvez, m. 88), María Méndez, Maëlle Lakrar, Yasmim; Sandie Toletti, Angeldahl (Moller, m.


78), Naomie Feller (Athenea, m. 78), Linda Caicedo; Caroline Weir (Leupolz, m. 64) y Signe Bruun (Alba Redondo, m. 64). * Goles 0-1, m. 11: Caroline Weir, a placer tras un rechace; 1-1, m.


71: Edna Imade, de tiro cruzado; 1-2, m. 84: Linda Caicedo, con disparo a media altura. * Árbitra Peñalver Pearce (comité balear). Amonestó con amarilla a las locales Leles Carrión y Sandra


Estévez. * Incidencias Partido correspondiente a la jornada 28 de Liga F disputado en el estadio de Los Cármenes ante 3.053 espectadores. El partido no fue uno más. Los Cármenes se abrió por


primera vez desde su inauguración para recibir al Real Madrid femenino, que solo había conocido la Ciudad Deportiva hasta ayer, ante 3.053 personas. El gran curso de las rojiblancas, junto


con los tres últimos triunfos consecutivos en Liga, fomentaba creer en la victoria, otro de los tantísimos méritos de la plantilla que dirige Arturo Ruiz –en su penúltimo encuentro en casa


con el Granada antes de su salida ya confirmada–. El Real Madrid ofreció escasas opciones, sabedor de que un pinchazo dejaba el trofeo en bandeja para el Barcelona si las azulgrana vencían


su compromiso en casa. A pesar de ello, Alberto Toril se guardó algunos ases en el banquillo. Misa Rodríguez, Alba Redondo y Athenea del Castillo, titulares habituales y campeonas del mundo


con España, no arrancaron de inicio, mientras que el Granada no se guardó absolutamente nada. Marta Carrasco fue la única novedad en el once de gala rojiblanco, sin la brasileña Jujuba en la


lista por lesión. Ruiz planteó su inconfundible zaga de tres, sello marca de la casa en un equipo versátil y con ángel que muerde por los costados. Así se presentó ante su afición, con


Laura Pérez apretando a Yasmim en su área tras el pitido inicial. La granadina encontró agujeros a la espalda de la lateral, pero la más clara fue para Edna al quedarse completamente sola


frente a Chavas. La nigeriana sorteó a la guardameta, pero cayó al suelo fruto del choque y perdió la noción del espacio tiempo. El balón rodó hacia la portería, pero la zaga madridista


salvó el primero 'in extremis'. Fue el único susto nazarí de la primera mitad, pues las blancas se reajustaron para limitar las contras granadinistas. SIN FALLO Su circulación fue


prácticamente perfecta, sin envíos defectuosos y transportando la pelota del medio a las bandas. Allí aguardaban Linda Caicedo y Naomie Feller, dos puñales con la meta de Sandra entre ceja y


ceja. La primera se mostró letal, saliendo airosa una y otra vez en sus duelos contra las zagueras rojiblancas. A los diez minutos, un centro de la colombiana al segundo palo se envenenó


tras rozar en Ornella. Alba Pérez no pudo despejar apropiadamente y Weir emergió para remachar el rechace. El tanto sumió al Granada en un mar de dudas, incapaz de reaccionar con


conducciones peligrosas. Todos los caminos llevaban a jugar en largo para Edna, superada por las centrales Méndez y Lakrar cada vez que había que pelear en el aire. Las de Toril siguieron a


lo suyo, obligando a Sandra a estirarse para salvar un nuevo gol blanco a disparo de Bruun. La delantera siempre encontró un resquicio entre la línea defensiva para hacer daño, experta en


hallar la mejor posición para el remate. La desventaja pudo ser mayor para el cuadro de Arturo Ruiz de no ser por la guardameta armillera, la mejor entre las rojiblancas. Antes del descanso


repelió un disparo a media altura de Sheila y se 'alió' con el poste para negarle el tanto a Caicedo, que continuó con sus diabluras en ambos flancos. De por medio, una vaselina


lejana de Bruun se marchó por encima del larguero. También lo probó Edna desde cuarenta metros, pero la intentona perdió verdad por el camino. REACCIÓN No hubo modificación alguna al


descanso, con el técnico granadinista mostrando fidelidad a su once predilecto. El equipo salió con otra cara de los vestuarios, aunque con el mismo guión. Bruun volvió a poner a prueba a la


defensa, pero Postigo saltó con todo para impedir su tijera. El Granada apretó para empezar a ganar los duelos divididos y generar espacios tras el sólido doble pivote que conformaron


Toletti y Angeldahl. La eterna lucha encontró el premio. Pasado el minuto 70, Alexia presionó a Sheila por la izquierda para ganar un balón complicado. La madrileña arrancó la moto y puso la


directa hacia el área para asistir a Edna, que maniobró para crearse el hueco y fusilar a la red. Los Cármenes estalló, contenido casi desde el arranque. Toril vio en su cabeza la Liga en


Can Barça y llamó a Athenea en pos de la revolución. Arturo buscó lo contrario, control para aplacar cualquier levantamiento, y dio entrada a Andrea Gómez. El marcador solo podría romperlo


una genialidad fuera de cualquier libreto. Ya pasado el 80', Méndez sacó a relucir su inspiración con un pase por alto indetectable a Caicedo, que controló libre para ajusticiar ante la


salida inútil de Sandra. Ni lo celebró, pendiente del banderín, que quedó inmóvil por mucho que protestara la guardameta, amarilla mediante. La miel se quedó en los labios rojiblancos, con


sabor fallido a Europa. Queda la Supercopa, todavía con posibilidades matemáticas, pero sin ningún margen de error.