Acusan a una mujer de matar a un amigo con graves problemas de movilidad y visión en castilla-la mancha

La Audiencia Provincial de Ciudad Real tiene previsto acoger del 17 al 19 de abril el juicio con jurado en el que una mujer se enfrenta a la petición de 17 años y 9 meses de prisión por

haber matado a un hombre en Alcázar de San Juan, tras golpearle con un objeto contundente. Según el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal al que ha tenido acceso EFE,

la mujer está acusada de los delitos de homicidio doloso y robo en casa habitada con empleo de violencia, y además concurre la circunstancia agravante de la responsabilidad criminal de abuso

de superioridad. Por el delito de homicidio doloso, la fiscalía pide 13 años y 6 meses de prisión; mientras que por el delito de robo en casa habitada, 4 años y 3 meses de prisión. Según el

escrito de conclusiones provisionales, la acusada aproximadamente entre las 18:00 y 18:30 horas del día 25 de noviembre de 2020 se dirigió a pie al exterior de la vivienda de un amigo suyo

al que visitaba con frecuencia para ayudarle en ocasiones en labores de limpieza de la casa a cambio de dinero, dado que este tenía problemas de movilidad, pues le había sido reconocido un

grado de discapacidad del 92%, de tipo física y sensorial, por osteoartrosis localizada degenerativa y ceguera. En esta ocasión, la acusada acudió a la vivienda con la intención de reclamar

un dinero que al parecer le debía el hombre y sabedora de que éste se encontraba en su interior, al no abrirle la puerta, la rompió para entrar en la vivienda. Una vez dentro de la casa, la

mujer y el hombre se encontraron en la cocina e iniciaron una fuerte discusión motivada por la supuesta deuda que existía entre ellos. Entonces, la acusada, valiéndose de su fuerte

complexión física y de que la víctima era una persona de menor envergadura que contaba con problemas de movilidad y visión, le golpeó fuertemente en la cabeza empleando para ello un objeto

contundente no determinado y con la intención de acabar con la vida del hombre o, al menos, siendo consciente del peligro que para su vida podría suponer un golpe en dicha zona. Acto

seguido, la propia acusada, actuando con intención de obtener un beneficio patrimonial económico, cogió al hombre, que estaba inconsciente a consecuencia del fuerte golpe sufrido, se lo

llevó al dormitorio principal de la vivienda, lo colocó en la cama y, a continuación, se apoderó de un televisor de plasma que estaba en el salón. Breves instantes después, la acusada se

presentó en un cercano domicilio y ofreció a su inquilino adquirir el mencionado televisor de plasma. Avisados tanto por vecinos del bloque como por familiares de la propia víctima, al

extrañarse todos ellos por los ruidos y golpes que provenían de la vivienda del mismo, se personaron poco después varias patrullas de agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de

Alcázar de San Juan, los cuales, tras acceder al piso, encontraron a la víctima inconsciente en la cama de su dormitorio. A consecuencia de la agresión recibida, el hombre sufrió un

traumatismo craneoencefálico de tal magnitud que no sólo le produjo fracturas óseas, si no que también le causó hemorragias cerebrales, edema cerebral y lesión axonal difusa con

encefalomalacia. A causa de dichas lesiones permaneció en coma todo el tiempo que estuvo hospitalizado hasta que acabó muriendo como consecuencia del fuerte golpe que había recibido.