Los aranceles y el coste de reducir la jornada laboral disparan la preocupación empresarial | la verdad

Miércoles, 9 de abril 2025 | Actualizado 10/04/2025 08:37h. Comenta Compartir 'Anticipar. Actuar. Juntos'. Ese fue el eslogan concreto que resonó este miércoles con fuerza en la

asamblea general de la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales (Croem). Un mensaje repetido en varias ocasiones por su presidente, Miguel López Abad, durante un discurso de

clausura muy reivindicativo, en el que se alertó de la preocupación existente ante los aranceles impuestos por EE UU. Una intervención en la que hizo también una especial reivindicación de

la figura social del empresario para el que pidió «respeto» y que «no se pueda utilizar como moneda de cambio». Tampoco faltaron las críticas a los planes del Gobierno central de la

reducción de la jornada laboral, así como a los problemas de infrafinanciación de la Comunidad, las carencias que existen aún en materia de infraestructuras y la tensión hídrica con el

Trasvase pese a la menor sequía. Y, por supuesto, un llamamiento a la necesidad de contar ya con los Presupuestos a nivel del Estado y regional. López Abad reconoció en el cierre de la cita

asamblearia, donde estuvo acompañado por el presidente de la patronal nacional CEOE, Antonio Garamendi, y del jefe del Gobierno regional, Fernando López Miras, «que cada día nos levantamos

con un susto mayor, como lo estamos viviendo con aranceles» de Trump. Por eso, resaltó la importancia de la «anticipación», que es lo que distingue al empresario. Por lo que puso en valor

que «hemos sido la primera Comunidad en la que nos hemos sentado en una mesa» para abordar la nueva realidad. Algo que también reflejó el presidente autonómico, que citó tanto la

constitución el Comité Aranceles como la puesta en marcha de medidas dotadas con 7,5 millones de euros. Eso sí, lanzó un claro mensaje a Miras cuando le dijo que «tenemos un problema en el

Presupuesto» y «espero que podamos tener una solución». Aunque, en la comparecencia posterior ante los medios se mostró confiado en que pueda estar pronto. Unas cuentas públicas que a nivel

estatal siguen del mismo modo, sin un horizonte claro, tal como alertó de igual manera. Al respecto, recordó que «tenemos el mismo pensamiento cuando hablamos del Gobierno nacional y

regional». Asimismo, puso el ejemplo de la importancia del consenso en materia de agua. Sobre la infrafinanciación que sufre la Región, López Abad volvió a lanzar la voz de alarma, pero a su

vez pidió que se haga un esfuerzo para mejorar la gestión de los recursos disponibles. Por otra parte, el mandatario de Croem advirtió de los riesgos existentes para la competitividad de

las empresas, al contemplarse una reducción de la jornada «cuando, para estar en la media productiva europea, deberíamos de trabajar una media de 41,8 horas; y, sin embargo, estamos

planteando bajar esas jornadas a 37,5». Un argumento que también fue apoyado por López Miras, que contrapuso que «en la Región no se toma una sola decisión que afecte al tejido productivo

sin contar con los empresarios» y que se trata de «un territorio de libertad económica, seguridad jurídica y estabilidad política para atraer proyectos». CRÍTICAS DE LA CEOE Sobre los

aranceles, Garamendi afirmó que «la situación es complicada en varios aspectos», por lo que hizo hincapié en la importancia de la «unidad de acción», ya que «estamos ante un problema

europeo». Por tanto, «precisamos más UE para la respuesta que se va a necesitar, para la negociación y para buscar más mercados». El presidente de la patronal nacional rechazó las

intenciones del Gobierno de España de que las empresas afectadas por los aranceles no puedan despedir personal si se benefician de ayudas públicas, puesto que «podríamos estar ante algo

estructural». De ahí que pidió a las pymes que tengan «cuidado» a la hora de solicitar las mismas de cara a aplicar expediente de regulación temporal; así como ante créditos ICO. Por último,

criticó la «interferencia» de Junts, formación que aseguró el martes que el 25% de estas ayudas irían para Cataluña. Algo que también rechazó el presidente de Croem. * UN «ESCUDO SOCIAL»

QUE SE MUEVE ENTRE REZOS Y LA REIVINDICACIÓN DE UNIDAD «El verdadero escudo social» de la Región, como calificó este miércoles a los empresarios el presidente de la Comunidad, se mueve en

estos tiempos en la ambivalencia de una economía que fluye entre el optimismo de unos indicadores positivos y las incertidumbres de una pugna geopolítica que con los aranceles de Estados

Unidos pone patas arriba el comercio internacional. Así se evidenció este miércoles en las conversaciones de las mesas y en los corrillos de los más de 300 empresarios e invitados que

asistieron a la asamblea general de Croem. Y es que todos tienen muy asumido que, de una manera u otra, todos se van a ver salpicados. Porque, como apuntó en su discurso el propio presidente

de CEOE, Antonio Garamendi, «Trump ha conseguido que el Papa Francisco esté contento, puesto que todos nos hemos puesto a rezar». Claro que, más allá de las oraciones al cielo, lo que nadie

duda es que el nuevo contexto va a obligar más que nunca a mejorar la eficiencia y apretarse más el cinturón en el día a día. Un evento en el que unos y otros hablaron de la importancia de

la unidad y de que se respete la voz de los empresarios, al mismo tiempo que se dirigían las miradas a los dos dirigentes patronales nacionales que hicieron acto de presencia en plena pugna

por la presidencia de Cepyme. Y es que el actual mandatario de la confederación de la pequeña y mediana empresa, Gerardo Cuerva, estuvo presente, tal como estaba previsto. De hecho, tanto

Garamendi como él guardaron las formas pese a la batalla e, incluso, se les vio conversar en algún momento. También se desplazó a Murcia para asistir a la asamblea el presidente de la

asociación de empresarios de Almería (Asempal), Cecilio Peregrín. Fernando López Miras aprovechó la ocasión para reivindicar que, «en la Región de Murcia, prestigiamos a los empresarios, los

respetamos y los ponemos en valor». Y aseguró que en este territorio «no se toma una sola decisión que afecte al tejido productivo sin contar con los empresarios». De esa forma respondía al

llamamiento hecho por Miguel López Abad cuando pidió más consideración a la labor que realizan los empresarios y al propio papel de interlocución de la confederación. En la cita de Croem

estuvieron presentes las fuerzas vivas del tejido productivo regional, incluidos los principales representantes sindicales, como fue el caso del secretario general de CC OO, Santiago

Navarro, así como de Teresa Fuentes, que asumirá el relevo a finales de mayo, y la nueva secretaria general de UGT, Paqui Sánchez Salmerón. Comenta Reporta un error