Correos y el banco de españa | ideal

Recuperar para el uso y disfrute públicos edificios emblemáticos del centro de Granada. Ponerlos en producción. Convertir alguno de ellos en museo. Pero en museo ... vivo y palpitante,

rebosante de actividad cultural. Es el plan de la Diputación, cuya campaña de adquisición de inmuebles para 'devolverlos' a la ciudadanía resulta de lo más interesante y atractivo.

Si hace unas semanas nos desayunábamos con la noticia de la adquisición del Castillo de La Calahorra, lo de Correos, el Banco de España y el Convento de Santa Inés, en el Albaicín, va en la

misma dirección. Me alegro especialmente por lo del edificio del Banco de España. Aunque hace lustros que está ocupado por la Fiscalía, en nuestro imaginario sigue siendo eso, el Banco de

España. Nunca entendí aquella decisión de la Junta de Andalucía, privando a la ciudad de un extraordinario espacio que debería haber sido museístico y cultural. Ahora, como a la fuerza

ahorcan y la Justicia se marcha en pleno para el Cubo, toca mudanza obligatoria. Otra vez. Me alegro de que Diputación se plantee la adquisición de estos edificios, insisto, y que no

terminen convertidos en hoteles o apartamentos turísticos; que ya vamos bien servidos. Que le den vida al centro urbano, eso es lo que hace falta en estos tiempos de gentrificación. Porque

además de brindar cultura, seguirán prestando servicios postales, en el caso de Correos; y administrativos, en el del Banco de España. Y eso es movimiento, trasiego y meneo ciudadano, más

allá de lo meramente turístico. Además, la corporación presidida por Francis Rodríguez está trabajando en la rehabilitación de otros edificios emblemáticos de la provincia, del Convento de

la Concepción de Guadix a la Casa Dengra en Baza y otra Casa Palacio en Loja. La intención: que acojan servicios necesarios para la comunidad y, a la vez, funcionen como centros culturales

que dinamicen el entorno. Eso es algo esencial para que los vecinos tanto de dichas localidades como de los pueblos cercanos encuentren alicientes para quedarse en las comarcas, más allá de

lo puramente laboral. Sin olvidar que, en la capital, el Centro José Guerrero y Palacio de los Condes de Gabia, ambos de Diputación, son referentes por cuanto a una programación expositiva y

cultural valiente y arriesgada, que da visibilidad al talento joven y colabora con un buen número de festivales a lo largo del año, brindando sus instalaciones de forma generosa.