El matadero que león privatizó por déficit crece y suma una gasolinera

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En 2009, tras dos operaciones fallidas en las que se pedían primero 5,3 millones y luego 4,6 millones, el Ayuntamiento de León privatizó el matadero municipal por 2,8 millones de euros. La


concejala de Comercio de con el PSOE, María Rodríguez, se felicitó entonces por «una operación redonda» que acababa con el «déficit anual de un millón de euros» que lastraba al consistorio,


titular de unas instalaciones que la Junta había cerrado por deficiencias de sanidad animal en la primavera de 2008. Dieciséis años después, las instalaciones de la carretera de Oteruelo,


adquiridas por Embutidos Carracedo, no sólo se mantienen, sino que han ampliado sus naves hasta casi duplicar los metros de superficie y sumarán, en los próximos meses, una estación de


servicio con un centro de lavado, tras una inversión de 1.638.656,12 euros, como se recoge en las licencias recién aprobadas. El matadero remite a la huelga de hambre con la que Morano


cimentó su leyenda después de que la Junta cerrara las instalaciones de José Aguado. Las nuevas nacieron de aquel encierro y se inauguraron 1989. Pero se cerraron en 2008, cuando con medio


millón de cabezas de ganado semanales en la línea de sacrificio, la administración autonómica obligó al cierre y la peregrinación de los industriales cárnicos, la mayoría a Medina de


Rioseco. El único rescate se encomendó a la privatización. Un año después del tranque, apareció una petición avalada por 66 empresarios cárnicos leoneses. El Ayuntamiento la vendió como


propuesta de grupo para hacerse con las instalaciones, pero luego los afectados aclararon que sólo habían firmado la página que les puso delante un industrial que ya tenía matadero en la


localidad zamorana de San Esteban de Vidriales. Embutidos Carracedo Llamas se hizo de esta manera con el matadero, tras superar la oferta que presentó Macelo Mieres, la sociedad que


sacrificaba para Alimerka. El crecimiento no ha parado, como se refleja en la licencia ambiental que regulariza los 2.062,15 metros cuadrados de la ampliación. La primera fase plantea «la


construcción de una nave de proceso, una nave de matanza de porcino y una nave destinada a cuadras». Para la segunda se recoge «la ampliación de la nave de matanza y la zona destinada a


aparcamiento en superficie, sobre el suelo rústico que rodea al complejo industrial», cita el documento, que marca el presupuesto en 1.199.795,87 euros. No se quedará ahí el crecimiento. El


plan se amplía con la licencia de obra para la «construcción de una estación de servicio y centro de lavado», cifrada en 438.860,25 euros, al pie de la ronda Sur y el nudo de autopistas y


autovías.