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Los gastos y las molestias de los viajes aéreos han hecho que muchas personas prefieran viajar por carretera. Pero las horas detrás del volante pueden ser agotadoras. Hay otra manera: puedes
viajar en autobús. De hecho, varias líneas se han propuesto demostrar que los viajes en autobús no tienen que ser estrechos e incómodos. Tienen comodidades que puedes encontrar en las
cabinas de primera clase, como asientos reclinables de lujo; abundante espacio entre filas; internet gratis, televisión y películas; mesas plegables; meriendas y bebidas gratis; asistentes a
bordo e incluso minisuites privadas con camas totalmente reclinables. The Jet (en inglés), un servicio de autobuses que se lanzó en el 2021 y conecta a Washington, D.C., con la ciudad de
Nueva York ($99–$199 por un viaje de ida), es un buen ejemplo. Solo 19 pasajeros se sientan en filas a 6 pies de distancia, un espacio poco común en los viajes de autobús. Los asientos
reclinables están fabricados con gel y espuma viscoelástica y algo llamado tecnología de cancelación de movimiento que hace que el viaje en carretera se sienta más tranquilo. “Realmente es
revolucionario, especialmente para los adultos mayores”, dice el fundador y director ejecutivo, Chad Scarborough. “Elimina todas las sacudidas y el mareo por movimiento. Teníamos una
pasajera con ciática, y ahora ella solo viaja con nosotros”. Otro avance adicional es la conexión wifi mejorada, considerada la más rápida en el transporte público, que te permite transmitir
lo que quieras mientras un asistente sirve meriendas, refrescos, cerveza y vino gratis. Scarborough dice que la frustración con los viajes aéreos ayudó a crear la oportunidad de un servicio
de autobús de lujo: “Intentamos eliminar todos los puntos problemáticos: no hay estaciones con multitudes, ni largas filas de seguridad, de hecho, no hay que esperar en ninguna fila”. Con
un plan para lanzar una ruta entre D.C., Nueva York y Boston a principios del próximo año, Napaway cuenta con autobuses con cama y unidades de asientos privadas y convertibles. “Conducir por
tu cuenta es agotador y no puedes hacer nada más”, dice el fundador y director ejecutivo Daniel Aronov. “El proceso del viaje aéreo toma por lo menos de cinco a seis horas, incluso un viaje
corto, con seguridad, retrasos, multitudes. El autobús regular está lleno de personas y los trenes pueden ser costosos”. Además, dice Aronov, los viajes en autobús son relativamente
ecológicos. Otras líneas que ofrecen una experiencia de primera clase con menos asientos más cómodos incluyen RedCoach, que presta servicios a 14 ciudades en Florida y ocho en Texas; y
Vonlane, que presta servicios a cinco ciudades en Texas, además de Atlanta, Nashville y Memphis.