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Getty Images Una dieta rica en pescado y a base de plantas y derivados de estas está asociada a una reducción de un 10% en el riesgo de padecer ataques cardiacos fatales. In English | Cuando
se trata de los ácidos grasos omega-3, como los que obtienes de la grasa del pescado, la pregunta es si realmente ayudan a prevenir las enfermedades cardiacas. Los hallazgos hasta este
momento están bastante divididos, pero un nuevo análisis exhaustivo de estudios internacionales sugiere una respuesta más clara: El consumo regular de pescado, nueces y otros alimentos ricos
en ácidos grasos omega-3 se asocia a una reducción significativa en el riesgo de morir de un ataque cardiaco fatal. "Nuestros resultados respaldan la importancia de consumir pescado y
ácidos grasos omega-3 como parte de una dieta saludable", según dijo Dariush Mozaffarian, autor sénior de investigaciones y decano de la facultad Friedman de Ciencias y Política de la
Nutrición de la Universidad de Tufts, en una declaración escrita. Esta nueva investigación, que publicarán el 27 de junio en la revista _JAMA Internal Medicine_ evitó todos los errores de
las investigaciones previas, muchas de las cuales dependían de los informes sobre consumo de alimentos que llevaban las propias personas sujetas al estudio o se llevaban a cabo entre
personas que ya padecían de enfermedades cardiacas. Por el contrario, un grupo compuesto de investigadores internaciones solamente analizó estudios extensos que midieron los niveles de
ácidos grasos omega-3 en la sangre y los tejidos, evitando así el prejuicio o el error de involucrar a las personas en el estudio para que reportaran lo que consumieron. Los investigadores
también excluyeron del estudio a los participantes que ya padecían de enfermedades cardiacas o habían sufrido una apoplejía. En total se analizaron 19 estudios de 16 países los cuales
involucraban a casi 46,000 adultos (entre 18 y 97 años). En general, consumir una dieta rica en pescados y a base de plantas y alimentos derivados de estas (como las nueces y las
semillas)—pero sin ingerir pastillas de aceite de pescado, como hicieron algunos de los participantes—se asocia a un 10% de reducción en el riesgo de sufrir un ataque cardiaco fatal. Las
personas que mostraron los niveles más altos de ácidos grasos omega-3 tienen un 25% menos de riesgo de sufrir un ataque cardiaco fatal, en comparación con las personas que mostraron niveles
más bajos de estos ácidos. Los hallazgos también fueron coherentes con respecto a la edad, el sexo, la raza, la presencia o ausencia de diabetes y el uso de aspirina o estatinas, según
informaron los investigadores, a pesar de que el estudio no puede probar una causa y efecto directo entre estos. "Estos nuevos resultados, incluso muchos estudios que anteriormente no
habían dado a conocer sus hallazgos, proveen el panorama más abarcador hasta la fecha acerca de la influencia de los ácidos grasos omega-3 en las enfermedades cardiacas", dice Liana Del
Gobbo, coautora e investigadora de la división de medicina cardiovascular de la Facultad de Medicina de Stanford University. Para añadir más ácidos grasos omega-3 a tu dieta, aquí te
presentamos las fuentes más importantes: PESCADO: Las mejores opciones son salmón (fresco o enlatado), trucha, rodaballo, sardinas enlatadas, macarela (fresca o enlatada) y ostras. HUEVOS:
Busca aquellos que sean de gallinas con una dieta fortificada en ácidos grasos omega-3 (así lo dirá en la etiqueta). La yema de esos huevos tendrá más omega-3. NUECES: Todas las nueces
contienen ácidos grasos omega-3, incluso la mantequilla de maní, pero las campeonas son las nueces de nogal las cuales tienen un mayor contenido. CARNE DE GANADO ALIMENTADO SOLO CON PASTO:
Contiene casi tres veces más ácidos grasos omega-3 que la carne de ganado alimentado con maíz, pero no tanto como el pescado. SEMILLAS: Las semillas de linaza son una buena fuente de ácidos
grasos omega-3. La chia y las semillas de cáñamo son buenas fuentes. Las semillas de girasol también contienen una pequeña cantidad. ACEITES: Aceite de canola, soja, linaza y nuez ALGUNOS
VEGETALES: La coliflor, las coles de bruselas, la col rizada, el brécol, la arúgula, el calabacín y la col silvestre también son fuentes de ácidos grasos omega-3 que puedes incluir en tu
dieta. TOFÚ Y EDAMAME: Las semillas de soja (también conocidas como edamame) sin cáscara y hervidas, y el tofú son buenas fuentes de ácidos grasos omega-3. TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: * Las
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