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Jueves, 8 de mayo 2025, 13:53 Comenta Compartir La empresa de tecnología submarina SAES celebró este jueves en sus instalaciones industriales de Cartagena el acto de finalización del sónar
BMAS, la primera de las cinco unidades que fabrica para el programa de fragatas F-110 que construye Navantia para la Armada. Se trata, según esta compañía participada por la Sepi, de un hito
destacado en el contrato por diez años y valorado en 27 millones de euros para equipar con estos sistemas de detección y localización de objetos bajo el agua a las cinco fragatas que en la
próxima década deben sustituir a las de la clase Santa María. Al acto asistió el director general de Estrategia e Innovación de la Industria de Defensa del Ministerio de Defensa, el teniente
general del Ejército del Aire Miguel Ivorra, acompañado por el almirante jefe del Arsenal de Cartagena, vicealmirante Alejandro Cuerda, y por el presidente de SAES, Javier Mármol Peñalver,
entre otros altos cargos militares y de las compañías participantes en este desarrollo tecnológico. El número de invitados a la celebración de dicho hito fue muy restringido y no hubo
presencia de medios de comunicación debido a las razones de confidencialidad que envuelven la fabricación de estos sónares. En concreto los BMAS para las F-110 se han realizado con
transferencia de tecnología del gigante francés Thales Defence Mission Systems (DMS), que, junto a Navantia, es accionista de referencia en esta compañía especializada en acústica submarina
y cuya sede central está en el astillero de Cartagena. SAES fabrica, integra y prueba la tecnología sonar para este proyecto, que es el de mayor importe firmado por la compañía desde los
contratos para los cuatro submarinos S-80. Dicho contrato no solo asegura carga de trabajo hasta 2030 para esta empresa altamente cualificada en la que trabajan más de un centenar de
profesionales, la mayoría ingenieros y técnicos en electrónica; también fortalece la industria local, necesaria para el suministro de materiales, y el papel de la propia SAES, que a partir
de ahora dispondrá de esa tecnología para futuros contratos. «Este logro es un testimonio del compromiso y la dedicación de nuestro equipo, y sitúa a SAES como líder en soluciones
tecnológicas avanzadas para la defensa marítima», dijo antes del acto Javier Mármol. En su opinión, contratos como el de los sónares para las F-110 consolidan a la empresas que preside como
un referente en tecnología submarina y como actor esencial en los grandes proyectos navales españoles. La compañía con sede en Cartagena juega un papel destacado en el desarrollo del entorno
acústico de la fragata F-110, que incluye no solo el sonar BMAS, sino también el Sistema de Gestión Acústica (AMS), el Sistema Acústico de Sonoboyas (SAS) y el Receptor de Sonoboyas (ARS).
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