Un covirán falto de ritmo paga el parón | ideal

Víctor M. Romero Martes, 2 de febrero 2021, 20:31 Comenta Compartir Hasta doce puntos de renta dispuso el Covirán frente al Lleida en su reaparición en la LEB Oro. Sin embargo, los

granadinos acusaron la falta de ritmo en la segunda parte, donde fallaron diez tiros libres decisivos. La derrota escuece al producirse ante un rival directo y que le ha superado en las dos

oportunidades. El equipo granadino se complica la clasificación entre los cinco mejores del grupo y, además, pasaría en desventaja con los ilerdenses en la fase por el ascenso. El Covirán

regresó por fin a la competición tras 41 días apartado de ella por contagios de coronavirus en los adversarios. Un tiempo exagerado de espera que, al menos, sirvió para la recuperación

física de los jugadores lesionados. La cita no era la más adecuada y Pablo Pin hubiera preferido al Canoe, que no se trata de un rival directo y hubiera permitido a los nazaríes rodarse

mejor. En realidad, el equipo rojinegro pasó por una inesperada pretemporada y medirse al Lleida no significó lo ideal. Los ilerdenses, reforzados con el venezolano Carrera, están en alza,

con tres victorias de las cuatro últimas jornadas. La inactividad y falta del ritmo que da la competición no iba a ayudar al Covirán. Pin dejó en el banquillo de principio a Bropleh, con

Costa al mando, Manu Rodríguez y Pardina, más Bortolussi y Fall bajo los tableros. De inicio, 'gorraco' de Bamba. Bortolussi abrió la veda tras las imprecisiones típicas del

reestreno con cinco puntos que rompieron el hielo. Pardina también probó con éxito en el triple pero el Lleida resistió, el balón siempre en manos de Michael Carrera. El vinotinto rápido

explicó su capacidad y experiencia, el haber competido en máximas categorías en varios países, además de una versatilidad que le permite botar, penetrar y fijar con técnica depurada el tiro

a media distancia. El Covirán quiso irse en el marcador, 10-5 y 12-7 con Fall como jefe en ambas zonas. El senegalés marcó el territorio con tapones. Empató Lleida al mejorar la puntería. A

2.40, Bropleh y Murphy entraron por Pardina y 'Borto'. 18-12 e Iriarte dio descanso a Fall. Presión en la subida del balón curiosa del Covirán sobre Chapela en pista delantera.

Turno de rotaciones y Diaz entró por Manu, apuesta de Pin con dos bases los últimos dos minutos. No obstante, la defensa incurrió en faltas a Polanco y Chapela. Germán por Costa, último

minuto. Segunda falta de Carrera, su mejor hombre, relevado por Feliu y disgusto del mítico Gustavo Aranzana, fue tonta, en ataque. Puesta en escena positiva ante un duro enemigo. 22-21 con

los despistes de Murphy. La diferencia de valoración, 29 por 18, no se reflejó en el resultado. El gancho de Iriarte abrió el segundo cuarto, con 'pajarito' Díaz de piloto de la

nave en la pista mientras Germán acompañó a un Bropleh titubeante y, dentro, el resbalones Murphy, con manos de flan pero su lucha clásica. Iriarte dejó el sitio a Fall mientras el Lleida

seleccionó mal el tiro. Aranzana lo observó y paró el juego: 30-24. Al tiempo muerto le sucedió más patinaje del finés Alex, lo que rebaña Fall y Díaz, canasta a la 'remanguillé'.

Pin recuperó al capitan Alejandro para la causa, lo devolvió al parqué por el irregular Murphy y, también, a Costa por Díaz. Bropleh no está fino y el entrenador granadino piensa en el

argentino para cerrar mejor el rebote. 38-29. Aun así, el liberiano aportó seguridad y anotó cuatro puntos ni a medio gas. Aranzana retiró a Buchanan, que vio muy grande a Bamba. 0/3 en

tiros de dos cuando trajo 10/11 de la última cita.Triple de Germán al 41-29, estirón serio del Covirán. La respuesta catalana está en otro acierto exterior de Feliu, que estableció el

prometedor 41-32 al descanso. Buen segundo cuarto de los granadinos, sensaciones agradables aunque Costa y Bropleh estuvieron por debajo de su nivel. ARO PEQUEÑO El dominio del rebote, 16

por 7 de la primera mitad, desapareció en el tercer cuarto. El Covirán encajó un 1-11 terrible. Era otro partido distinto. Buchanan cometió la tercera falta pero los hombres de Pin veían ya

el aro muy pequeño. El tiempo muerto de Pin con 44-43 a seis minutos de que sonara la bocina no cambió la dinámica. Tres puntos con un mate y un tiro libre de Fall. Los nervios se apoderaron

de los nazaríes. Volvieron Manu y Bropleh. A cuatro minutos, Pardina al tiro libre y tampoco. Y hasta Costa, la mitad, uno solo. El base encontró la luz al túnel y acabó con la sequía de

triple. 48-43 y tiempo de Aranzana. El Covirán llamó a su 'killer'. Bropleh despertó, lo necesitaba, dos guijonazos desde la loseta. El letón Vecvagars, enorme incordio. Lo coló

casi todo. Nuevo empate a 54. Y Murphy, agua, acusó el parón tan largo. Los tiros libres, otra pesadilla (2/8 en este parcial), Díaz falló dos. Al último cuarto, ya sin la ventaja, que fue

máxima de doce tantos. El rebote, además, se igualó a 21-17. Chapela dio la vuelta de tres, 56-57. Pintaron bastos. Hasta Bulic, con pinta de Manolo Piña, molestó. Una técnica a Chapela por

fingir tampoco se aprovechó. También Murphy perdonó de tiro libre. Dos más uno de Iriarte que mantuvo la delantera. Ya era una lotería. Ruleta rusa. Polanco apareció (lo hizo en la ida y

cuatro abajo al final). Nueve tiros libres errados con el de Iriarte: 71-68. El letón dio la lata. 23 puntos suyos y 71-72, detuvo Pin a 2.43. Oscuro. Vecvagars anotó con facilidad y al

Covirán le costó un mundo. Iriarte de 'cuatro' como último recurso. Polanco al 73-76 de triple. Un minuto. Diez tiros libres, otro de Fall, por el inodoro, diez puntos, todos tras

el descanso. Una puya. Bulic sí los coló: 74-79. A 20 segundos, última esperanza tras el triple de Bropleh. 77-79. Otro libre al 77-80 pero el liberiano, como el Covirán, no estuvo fino.

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