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Sábado, 24 de mayo 2025, 21:46 Comenta Compartir La ambición iniciada por Turki Al-Sheikh ha cambiado de manos tras un incremento del valor del club de más de 50 millones de euros. Los 100
en los que se ha valorado el traspaso al nuevo propietario, la Compañía Saudí de Medios (SMC por sus siglas en inglés) supone una plusvalía nada desdeñable de 52 millones de euros para el
jeque antes de hacer las maletas. Se deja en Almería muchas promesas que ahora asumirá Al-Khereiji, el nuevo consejero delegado. Su liderazgo será decisivo para consolidar al Almería en la
élite del fútbol español y más allá. 1. ASCENSO Y CONSOLIDACIÓN El primer y más palpable desafío para Al-Khereiji es asegurar el ascenso a Primera División y, una vez logrado, la
consolidación duradera en la máxima categoría. El verdadero testamento de su gestión será lograr una estabilidad que permita al club arraigarse en la élite. La Liga española es altamente
competitiva, y la permanencia exige una planificación deportiva impecable y una gestión de plantilla inteligente. Como propietario, Al-Khereiji tiene la potestad de asegurar que la
estructura deportiva pueda contratar y competir. Esto implica una inversión sostenida y una estrategia de desarrollo de promesas. La consolidación en Primera es la clave para todo el
proyecto: maximizará los ingresos televisivos y el atractivo para patrocinadores, llena las gradas, empuja a la afición y pone al club en la picota. 2. LA RENOVACIÓN DEL ESTADIO Este segundo
gran reto abarca la modernización de una infraestructura clave: el UDAlmería Stadium. La renovación y ampliación para mejorar la experiencia del aficionado y aumentar su capacidad es una
promesa que Al-Khereiji recibe de su antecesor y que supone una inversión significativa. Un estadio moderno, funcional y con mayor aforo sería una declaración de intenciones y un motor no
solo para el club sino para diversificar sus ingresos, por ejemplo, con la cesión para eventos culturales, musicales o sociales. 3. LA CIUDAD DEPORTIVA Paralelamente, la construcción de la
ciudad deportiva de El Toyo –el proyecto es, sencillamente, espectacular– supondría el espaldarazo más significativo a un proyecto de futuro. De Al-Khereiji va a depender la máxima
responsabilidad de transformar una idea, un proyecto, en la materialización de un centro de alto rendimiento para el primer equipo y la forja de futuras estrellas. No cabe duda, es una
inversión estratégica a largo plazo. 4. UNA UDA DE TODOS Sin embargo, uno de los desafíos más sensibles y cruciales para Al-Khereiji es fortalecer el vínculo emocional entre el club, su
nueva propiedad y la sociedad almeriense, especialmente con la afición. Si bien la inversión ha sido notable, la conexión con el tejido social local es fundamental para la sostenibilidad y
el arraigo del proyecto. Como propietario, Al-Khereiji puede impulsar una conexión más abierta y cercana por parte de la cúpula directiva. La afición siente el club no solo como una
inversión económica, sino como una parte intrínseca de su identidad y orgullo. Iniciativas que fomenten la participación de los seguidores, el diálogo directo con la propiedad y la
visibilidad de la implicación del club en la vida de la ciudad pueden disipar cualquier percepción de distancia. 5. PROYECTAR ALMERÍA EN EUROPA A TRAVÉS DEL CLUB Este desafío se proyecta más
allá del ámbito deportivo para abrazar una dimensión de marketing territorial. Al-Khereiji tiene la oportunidad de capitalizar la visibilidad de la UD Almería para impulsar la proyección de
la ciudad de Almería a nivel europeo y global. El fútbol de élite es una vitrina mediática inigualable, y el éxito del club puede ser un catalizador para el turismo, la inversión y la
imagen de la provincia. Esto implica una estrategia de comunicación que no solo hable del club, sino que integre la rica oferta cultural, paisajística y económica de Almería. Como delegado
de la propiedad del club, Al-Khereiji puede convertir la UD Almería en un embajador de la provincia, utilizando el fútbol como herramienta para destacar sus virtudes y atraer nuevas
oportunidades.Ser el trampolín en el que no solo salta el club, sino también quienes vivimos en Almería. Comenta Reporta un error