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Cuando Andrea Krenek estaba creciendo en Texas, sus comidas a menudo se centraban en gruesos cortes de bistec, abundantes barbacoas y sándwiches. Pero a medida que Krenek aprendió más sobre
nutrición y definió sus propios valores, su dieta evolucionó. Ahora, convertida en dietista registrada, chef y académica postdoctoral en la Facultad de Medicina de la Universidad de
Stanford, Krenek evita completamente la carne. "Hay tantas alternativas a la carne que pueden no ser idénticas, pero realmente son increíblemente similares, si no mejores", dice
Krenek. Aunque no todos necesitan, quieren o pueden tomar la misma decisión, la investigación sigue acumulando evidencia a favor de comer plantas en lugar de animales. Más recientemente, un
estudio masivo publicado en _The Lancet Diabetes & Endocrinology_ descubrió que tanto la carne roja procesada como la no procesada aumentan significativamente el riesgo de desarrollar
diabetes tipo 2 (en inglés). Es más evidencia de que "para muchas poblaciones, enfocarse en alimentos a base de plantas y limitar la carne puede traer varios beneficios, desde reducir
los riesgos de enfermedad crónica hasta apoyar la salud ambiental y el rendimiento atlético", dice Krenek. "Cualquiera que sean los motivadores y la razón", agrega,
"cualquier cambio pequeño o grande hacia más plantas enteras es maravilloso". Aquí está lo que más debes saber sobre las ventajas de reducir el consumo de carne, y cómo adaptar tu
dieta sin sentirte privado. 1. REDUCE EL RIESGO DE DIABETES TIPO 2 En el estudio de _Lancet_, publicado en septiembre del 2024, los investigadores analizaron los patrones de alimentación
declarados por casi 2 millones de adultos en 20 países. Luego rastrearon cuántos de los participantes habían desarrollado diabetes tipo 2 una mediana de 10 años después. Alrededor del 5.5%
de ellos tenían diabetes, y su consumo de carne parecía tener importancia. Específicamente, el estudio encontró que solo 1.8 onzas de carne procesada al día (o unas pocas rebanadas de
tocino) se asociaron con un aumento del 15% en el riesgo de diabetes tipo 2, y 3.5 onzas de carne roja no procesada al día (similar a un bistec pequeño) se asociaron con un aumento del 10%
en el riesgo, incluso cuando se tienen en cuenta otros factores como el tamaño del cuerpo, la actividad física y los antecedentes familiares. En algunos casos, el pollo también se asoció con
una mayor probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2, pero se necesita más investigación en esa área, dijeron los investigadores. Los resultados no son una sorpresa para Vandana Sheth, una
dietista registrada y especialista certificada en cuidado y educación de la diabetes en Los Ángeles. “Básicamente, todo se reduce a la resistencia a la insulina”, explica. En general, las
grasas saturadas, que se encuentran en carnes procesadas y rojas, pueden provocar resistencia a la insulina, lo que afecta tu nivel de azúcar en la sangre y contribuye a la diabetes tipo 2.
“Por lo tanto, agregar más alimentos de origen vegetal podría ser una buena opción, no solo [por] este estudio, sino porque sabemos que más proteínas de origen vegetal pueden ser útiles en
términos de salud general”, dice Sheth, quien también es autor de _My Indian Table: Quick & Tasty Vegetarian Recipes._ 2. REDUCE EL RIESGO DE ENFERMEDAD DEL CORAZÓN Lo que es bueno para
el riesgo de diabetes (o su manejo) también suele ser bueno para tu corazón. Y el consumo de carne, o más precisamente, la falta de este, no es una excepción. Un estudio abarcador del 2021
publicado en _The American Journal of Clinical Nutrition_ (AJCN), por ejemplo, descubrió que comer un poco más de 5 onzas de carne procesada (el equivalente a cinco rebanadas de fiambre) por
semana aumentaba el riesgo de enfermedad cardíaca (en inglés) en un 46% en comparación con no comer carne procesada. Según UCLA Health, gran parte del vínculo se puede explicar por el
contenido de sal de la carne procesada, ya que la ingesta de sal puede aumentar la presión arterial, el peso y, a su vez, la probabilidad de sufrir enfermedades cardíacas. "Como adulto
mayor, vas a beneficiarte particularmente de reducir tu consumo de carne roja" debido a su conexión con la enfermedad del corazón, la principal causa de muerte en Estados Unidos, dice
Sheth.