7 datos sobre la disparidad racial en la jubilación

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Para gran parte de la población del país, lograr una jubilación con estabilidad económica es todo un reto, pero resulta mucho más difícil para las personas negras. Las cifras reflejan un


panorama desolador. Entre todos los grupos raciales y étnicos, los trabajadores negros de 51 a 64 años son los que tienen menos probabilidades de tener una cuenta de jubilación, según un


informe que realizó la Oficina de Responsabilidad Gubernamental de EE.UU. en julio del 2023 (en inglés). Cuando tienen una cuenta, su saldo promedio es muy inferior al de los adultos blancos


de edad similar de todos los niveles de ingresos. La desigualdad en el ahorro es tan solo la punta de un iceberg muy grande. En el 2022, la mediana del patrimonio neto global de las


familias blancas fue casi seis veces superior al de las familias afroamericanas —$285,000 frente a $44,900—, según datos de la Reserva Federal. Estas disparidades son producto de muchas


otras que abarcan toda la vida económica del país: son legados de las desigualdades que repercuten y se acumulan durante la vida laboral de las personas negras.  La igualdad en la jubilación


“no significa que todo el mundo vaya a tener el mismo patrimonio. Cada persona tiene una vida financiera diferente, objetivos diferentes y obligaciones diferentes”, señala Karen Andres,


directora de la Iniciativa de Ahorro Jubilatorio del Programa de Seguridad Financiera del Aspen Institute. “Sin embargo, las disparidades que podemos observar en los saldos de ahorro para la


jubilación son tan marcadas que parecería que nuestro sistema de ahorro jubilatorio no está dando a todos lo que necesitan”.  Estas disparidades raciales tienen consecuencias significativas


y persistentes en la estabilidad económica en la edad adulta, cuando las personas tienen menos posibilidades de compensar un ahorro jubilatorio insuficiente. La población negra de 65 años o


más depende mucho más del Seguro Social para su jubilación que la población blanca, y tiene más del doble de probabilidades de vivir en la pobreza. A continuación, te presentamos 7 datos


que te ayudarán a comprender los motivos que suelen dificultar el ahorro jubilatorio para los trabajadores negros. _(Enlaces en inglés)_ GETTY/AARP 1. LOS TRABAJADORES NEGROS COBRAN MENOS


Las familias negras también tienen muchas más probabilidades de percibir ingresos muy bajos. La encuesta sobre la economía del hogar y toma de decisiones (Survey of Household Economics and


Decision-Making) que la Reserva Federal realizó en el 2021 reveló que el 43% de las familias negras tienen ingresos anuales inferiores a $25,000, en comparación con el 20% de las familias


blancas. La desigualdad jubilatoria está “arraigada en la desigualdad salarial”, según indica el _Leadership Forum on Retirement Savings_ del Aspen Institute en un informe del 2021. “Si no


tienes ingresos suficientes como para cubrir las facturas habituales y ahorrar lo necesario a corto plazo para hacer frente a las emergencias, ¿cómo podrás ahorrar para el futuro y mantener


intacto lo que consigas ahorrar?”. Los ingresos más bajos no solo reducen los ahorros. También reducen los pagos futuros del Seguro Social, porque estos beneficios se basan en el historial


de ingresos del trabajador. GETTY/AARP 2. EL DESEMPLEO ES MAYOR EN LA POBLACIÓN NEGRA La disparidad de 2 a 1 en el desempleo es “una de las características más persistentes y determinantes


del mercado laboral del país”, escribieron los economistas Valerie Wilson, del _Economic Policy Institute_, y William Darity, de la Universidad de Duke, en un documento de marzo del 2022


sobre la desigualdad laboral. Según ellos, esta desigualdad se mantiene tanto en épocas de prosperidad económica como de crisis, y es relativamente constante en función de la edad, el


género, la región y el nivel educativo.  Los motivos de este mayor índice de desempleo se han debatido durante mucho tiempo, y las posibles causas abarcan desde la discriminación racial


hasta la ubicación de las oportunidades laborales. Si bien las razones siguen sin resolverse en su mayor parte, las consecuencias económicas resultan mucho más claras.