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Tras la muerte de Abby, su querida perrita de servicio, Joe Jacobs, veterano de las Fuerzas Aéreas, quería tener un cachorro al que pudiera adiestrar para sustituirla. Un grupo de Facebook
para entusiastas de los perros pastor alemán parecía el lugar lógico para que Joe, de 64 años, y su mujer Ann, de 63, que viven en Conneaut, Ohio, se pusieran en contacto con un criador.
Ann, la mujer de Joe, se alegró al ver un anuncio sobre cachorros en venta, negoció un trato de $500 con el criador y envió el pago a través de Zelle. El criador dijo que les entregaría el
perro en el aeropuerto de Erie, pero a medida que se acercaba la fecha las cosas empezaron a ponerse sospechosas. El criador pedía más y más dinero por diversos motivos, consiguiendo que Joe
y Ann pagaran poco a poco hasta que habían enviado un total de $800. El día en que el criador debía entregar el cachorro, Joe y Ann esperaron en vano en el aeropuerto. Nunca recibieron un
perro ni les devolvieron su dinero. Es probable que el “criador” ni siquiera tuviera un perro. “He luchado mucho por este país”, declaró Joe a Cleveland 19 News (en inglés). “En el
extranjero y todo. Que la gente haga esto y se aproveche de ti duele. Duele profundamente”. LAS ESTAFAS CON PERROS DE SERVICIO SON HABITUALES “Ocurre muy a menudo”, dijo a AARP Experience
Counts Nicole Rossman, propietaria de _LandShark German Shepherds _(en inglés), en Pierpont, Ohio. “Lo he visto mucho como criadora”. Se enteró de la difícil situación de los Jacob y le
regaló a la pareja un cachorro negro pastor alemán, Kaylee, junto con 50 libras de comida para perro y adiestramiento para perros de servicio. “Son de nuestra zona y queríamos ayudarlos”,
dijo. Joe y Ann compartieron su historia con la esperanza de evitar que otros fueran estafados. Rossman, el buen samaritano en este caso, tiene algunos consejos para evitar las estafas de
perros: CONFÍA PERO VERIFICA Comprueba si el criador con el que estás tratando tiene licencia de criador en su estado. No pasa nada por comprar de un criador que no esté cerca de ti, pero
asegúrate de que sea una empresa legal. “La mayoría de los criadores legales son empresas reales con licencia”, afirma Rossman. “Yo estoy escrita con el estado de Ohio. Tengo una sociedad de
responsabilidad limitada (LLC). Mi nombre es marca registrada. Hay mucha información accesible para comprobar que somos quienes decimos ser”. Pide también referencias a tu criador y
consulta con la policía local y estatal para saber si el criador en cuestión ha estado relacionado con alguna estafa de la que se haya informado. Otra opción es preguntar al criador si es
miembro de un grupo local afiliado al American Kennel Club.